Músculos magullados
Un músculo magullado, o contusión muscular, es una lesión en las fibras musculares y los tejidos conectivos. A menudo se asocia con los músculos de la parte superior de la pierna. En los deportes, un músculo magullado es la segunda causa principal de lesiones deportivas detrás de las distensiones musculares.
Los músculos magullados suelen ser causados por un trauma o fuerza brusca en una parte del cuerpo. Este trauma aplasta las fibras musculares, pero no rompe el tejido de la piel. En muchos casos, un músculo magullado se ve como una lesión leve. En casos más severos, pueden llevar a lesiones tisulares graves y complicaciones.
¿Cómo se puede magullar un músculo?
Los músculos magullados son a menudo el resultado de fuerza brusca o trauma en su cuerpo. Este tipo de lesión es más común en los deportes de contacto directo. También puede lastimar un músculo de una caída dura o chocar con una superficie dura.
Cuando chocas con un objeto duro u otra persona, el impacto aplasta las fibras musculares y el tejido conectivo debajo de tu piel. Sin embargo, tu piel no se rompe por el golpe. El daño a las fibras musculares puede causar sangrado debajo de la piel y acumularse en el área afectada. Esto a menudo resulta en un moretón dolorido.
Un moretón muscular generalmente no causa daño al músculo afectado. Por esa razón, los atletas son físicamente capaces de jugar con moretones leves. En casos más severos, los atletas pueden ser forzados a descansar y limitar la actividad física hasta que su músculo se haya curado completamente. Esto ayuda a prevenir una lesión más grave.
Aparte de los atletas, las personas con mayor riesgo también incluyen a las personas mayores.
¿Cómo se siente un músculo magullado?
Los síntomas más comunes de un músculo magullado es el dolor. El dolor se localiza típicamente en el área afectada.
Además del dolor, los síntomas que pueden acompañar a un músculo magullado incluyen:
- descoloramiento
- hinchazón
- Dolor agravado en los días siguientes a la lesión.
- un nudo en el sitio de la lesión
- movilidad limitada
Si su lesión es más grave, puede haberse roto un hueso o haber dañado órganos internos. El sangrado o la hinchazón debajo de la piel también pueden causar un shock. Si comienza a experimentar un empeoramiento de los síntomas o si su lesión no muestra signos de mejoría, busque atención médica.
Las lesiones musculares graves que no se traten pueden provocar complicaciones médicas. Dos de las complicaciones más comunes incluyen:
- Síndrome compartimental. Si desarrolla una hemorragia interna a causa de una lesión, la presión puede hacer que el tejido se inflame. Esta es una condición dolorosa y peligrosa que puede disminuir el flujo de sangre a sus músculos y células nerviosas, lo que lleva a la muerte de los tejidos e incluso a la posible pérdida de la extremidad.
- Miositis osificante. Un hematoma muscular profundo o un traumatismo repetido en el mismo músculo pueden hacer que los tejidos musculares se endurezcan y formen huesos. Esta complicación puede afectar peligrosamente su rango de movimiento.
Tratamiento de un músculo magullado
Las lesiones musculares leves comienzan a sanar en unos pocos días. Su médico puede recetarle medicamentos antiinflamatorios para reducir la inflamación y la inflamación y para acelerar su recuperación.
Su médico también puede recomendar el método RICE:
- Descanso. Proteja su lesión de daños mayores al detener la actividad física innecesaria.
- Hielo. Aplique hielo a su lesión para reducir el dolor, la hinchazón y el sangrado. No aplique hielo directamente sobre la piel. En su lugar, envuelva el hielo en un paño o toalla húmeda para proteger su piel de las quemaduras de hielo. Aplicar hielo durante 20 minutos cada dos horas. Repita este proceso durante unos días después de su lesión.
- Compresión. Envuelva su lesión con una venda para proporcionar apoyo adicional. Esto también evita más sangrado y reduce la hinchazón.
- Elevación. Eleve su lesión por encima del nivel de su corazón cuando está en reposo. Esto aumenta la circulación y reduce la hinchazón.
Las magulladuras musculares leves responden al método RICE dentro de las 24 a 48 horas. Si no observa signos de mejoría, busque atención médica. Esto podría ser un indicio de una lesión más grave.
En casos más severos, su médico puede recomendar terapia física para aumentar la movilidad.
Recuperación de un músculo magullado
Los golpes repetidos a los grupos musculares principales o el traumatismo en partes de su cuerpo pueden provocar moretones leves. Estas contusiones son más comunes entre los atletas y las personas mayores. El tiempo de recuperación puede oscilar entre unos pocos días y unas pocas semanas.
Aunque muchos casos de hematomas musculares se curan por sí solos, las lesiones musculares más graves pueden requerir atención médica. Si sus síntomas no mejoran a los pocos días de desarrollar la lesión, consulte a su médico.