Pericondrio

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El pericondrio es una capa densa de tejido conjuntivo fibroso que cubre el cartílago en varias partes del cuerpo.

El tejido del pericondrio comúnmente cubre estas áreas:

  • Cartílago elástico en partes del oído.
  • nariz
  • Cartílago hialino en la laringe.
  • Cartílago hialino en la tráquea
  • epiglotis
  • Área donde las costillas se conectan al esternón.
  • área entre las vértebras espinales

En los adultos, el tejido de pericondrio no cubre el cartílago articular en las articulaciones o donde los ligamentos se adhieren al hueso. Sin embargo, en los niños, el pericondrio se puede encontrar en el cartílago articular junto con áreas comunes en todo el cuerpo. Esto suele ser el motivo por el que la regeneración celular es más probable en niños que en adultos.

El pericondrio está hecho de dos capas:

  • Capa fibrosa externa. Esta densa membrana de tejido conectivo contiene células de fibroblastos que producen colágeno.
  • Capa condrogénica interior. Esta capa contiene células de fibroblastos que producen condroblastos y condrocitos (células de cartílago).

El tejido de pericondrio ayuda a proteger a los huesos de lesiones, específicamente a aquellos que aún están en crecimiento o en desarrollo. Como forma de protección, fomenta la regeneración celular para reducir el tiempo de recuperación. Esto es especialmente cierto para los niños, pero puede no serlo para los adultos.

Su tejido de pericondrio también proporciona elasticidad a partes de su cuerpo al reducir la fricción. Esto puede prevenir daños en los huesos, lesiones y deterioro a largo plazo.

La naturaleza fibrosa del tejido del pericondrio permite que el flujo de sangre pase fácilmente a través de su cuerpo. Este flujo sanguíneo constante ayuda a distribuir los nutrientes necesarios para fortalecer y nutrir el cartílago. El tejido fibroso de pericondrio también permite que el oxígeno y los nutrientes fluyan sin obstrucción.

Condiciones que afectan al pericondrio.

Un traumatismo en el cartílago puede dañar el tejido pericondrium. Las lesiones comunes incluyen:

  • Pericondondritis. Esta afección hace que el tejido del pericondrio se inflame e infecte. Las picaduras de insectos, perforaciones o traumatismos son causas comunes de esta lesión. Si se le diagnostica esta afección, puede experimentar dolor, enrojecimiento e hinchazón. En casos más graves, puede desarrollar fiebre o acumular pus en su lesión. La pericondritis puede convertirse en una condición recurrente. Se puede tratar con antibióticos.
  • Oreja de coliflor. Esta lesión común, que suele ocurrir en los atletas, hace que el oído se hinche. Un traumatismo grave o un golpe fuerte en el oído pueden dañar su pericondrio y reducir el flujo sanguíneo. Esto hace que la parte afectada de su oído se vea como una coliflor. La oreja de coliflor se puede tratar con antibióticos o puntos de sutura si su médico elimina la obstrucción para aumentar el flujo sanguíneo constante.