¿Qué es el síndrome de dificultad respiratoria aguda?
El síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) es una afección pulmonar grave. Ocurre cuando el líquido llena los sacos de aire en sus pulmones. Demasiado líquido en sus pulmones puede disminuir la cantidad de oxígeno o aumentar la cantidad de dióxido de carbono en el torrente sanguíneo. El SDRA puede evitar que sus órganos obtengan el oxígeno que necesitan para funcionar, y eventualmente puede causar una falla orgánica.
El SDRA afecta más comúnmente a las personas hospitalizadas que están muy enfermas. También puede ser causado por un trauma grave. Los síntomas usualmente ocurren dentro de uno o dos días de la enfermedad o trauma original, y pueden incluir falta de aliento extrema y jadeo por aire.
El SDRA es una emergencia médica y una afección potencialmente mortal.
Síntomas del síndrome de dificultad respiratoria aguda
Los síntomas de SDRA suelen aparecer entre uno y tres días después de la lesión o trauma.
Los síntomas y signos comunes de SDRA incluyen:
- respiración trabajosa y rápida
- Fatiga muscular y debilidad general.
- presión arterial baja
- piel o uñas decoloradas
- una tos seca y cortante
- una fiebre
- dolores de cabeza
- un pulso rápido
- confusión mental
¿Qué causa el síndrome de dificultad respiratoria aguda?
El SDRA es causado principalmente por daño a los diminutos vasos sanguíneos en sus pulmones. El líquido de estos vasos se filtra hacia los sacos de aire de los pulmones. Estos sacos de aire son donde entra el oxígeno y se elimina el dióxido de carbono de la sangre. Cuando estos sacos de aire se llenan de líquido, llega menos oxígeno a la sangre.
Algunas cosas comunes que pueden llevar a este tipo de daño pulmonar incluyen:
- inhalación de sustancias tóxicas, como agua salada, productos químicos, humo y vómitos
- desarrollar una infección severa de la sangre
- desarrollar una infección grave de los pulmones, como neumonía
- recibir una lesión en el pecho o la cabeza, como durante un accidente automovilístico o deportes de contacto
- Sobredosis de sedantes o antidepresivos tricíclicos.
Factores de riesgo para el síndrome de dificultad respiratoria aguda.
El SDRA suele ser una complicación de otra condición. Estos factores aumentan el riesgo de desarrollar SDRA:
- edad mayor de 65 años
- enfermedad pulmonar crónica
- un historial de abuso de alcohol o fumar cigarrillos
El SDRA puede ser una condición más grave para las personas que:
- tener un shock tóxico
- son mayores
- tiene insuficiencia hepática
- tener un historial de abuso de alcohol
Diagnóstico del síndrome de dificultad respiratoria aguda
Si sospecha que alguien que conoce tiene SDRA, debe llamar al 911 o llevarlo a la sala de emergencias. El SDRA es una emergencia médica y un diagnóstico temprano puede ayudarlos a sobrevivir a la enfermedad.
Un médico puede diagnosticar SDRA de varias maneras diferentes. No hay una prueba definitiva para diagnosticar esta condición. El médico puede realizar una lectura de la presión arterial, realizar un examen físico y recomendar cualquiera de las siguientes pruebas:
- un análisis de sangre
- una radiografía de tórax
- una tomografía computarizada
- hisopos de garganta y nariz
- un electrocardiograma
- un ecocardiograma
- un examen de la vía aérea
La presión arterial baja y el oxígeno sanguíneo bajo pueden ser signos de SDRA. El médico puede confiar en un electrocardiograma y un ecocardiograma para descartar una afección cardíaca. Si una radiografía de tórax o una tomografía computarizada revelan sacos de aire llenos de líquido en los pulmones, se confirma un diagnóstico de SDRA.
También se puede realizar una biopsia de pulmón para descartar otras enfermedades pulmonares. Sin embargo, esto rara vez se hace.
Tratamiento del síndrome de dificultad respiratoria aguda.
Oxígeno
El objetivo principal del tratamiento con SDRA es asegurar que una persona tenga suficiente oxígeno para prevenir la falla orgánica. Un médico puede administrar oxígeno por máscara. También se puede usar una máquina de ventilación mecánica para forzar el aire en los pulmones y reducir el líquido en los sacos de aire.
Manejo de fluidos
El manejo de la ingesta de líquidos es otra estrategia de tratamiento de SDRA. Esto puede ayudar a asegurar un adecuado balance de líquidos. Demasiado líquido en el cuerpo puede conducir a la acumulación de líquido en los pulmones. Sin embargo, muy poco líquido puede causar que los órganos y el corazón se vuelvan tensos.
Medicación
Las personas con SDRA a menudo reciben medicamentos para tratar los efectos secundarios. Estos incluyen los siguientes tipos de medicamentos:
- medicamentos para el dolor para aliviar las molestias
- antibióticos para tratar una infección
- anticoagulantes para evitar la formación de coágulos en los pulmones o las piernas
Rehabilitación pulmonar
Las personas que se recuperan de SDRA pueden necesitar rehabilitación pulmonar. Esta es una manera de fortalecer el sistema respiratorio y aumentar la capacidad pulmonar. Tales programas pueden incluir entrenamiento físico, clases de estilo de vida y equipos de apoyo para ayudar en la recuperación del SDRA.
¿Cuál es la perspectiva?
La American Lung Association estima que entre el 30 y el 50 por ciento de las personas con SDRA mueren por esta causa. Sin embargo, el riesgo de muerte no es el mismo para todas las personas que desarrollan SDRA. La tasa de mortalidad está vinculada tanto a la causa del SDRA como a la salud general de la persona. Por ejemplo, una persona joven con SDRA inducido por trauma tendrá una mejor perspectiva que una persona mayor con una infección sanguínea generalizada.
Muchos sobrevivientes de SDRA se recuperan completamente en unos pocos meses. Sin embargo, algunas personas pueden tener daño pulmonar de por vida. Otros efectos secundarios pueden incluir:
- debilidad muscular
- fatiga
- una calidad de vida deteriorada
- salud mental comprometida
Prevención del síndrome de dificultad respiratoria aguda.
No hay manera de prevenir el SDRA por completo. Sin embargo, es posible que pueda reducir su riesgo de SDRA haciendo lo siguiente:
- Busque asistencia médica inmediata para cualquier trauma, infección o enfermedad.
- Deje de fumar cigarrillos y manténgase alejado del humo de segunda mano.
- Renunciar al alcohol. El consumo crónico de alcohol puede aumentar su riesgo de mortalidad y prevenir la función pulmonar adecuada.
- Obtenga su vacuna contra la gripe cada año y la vacuna contra la neumonía cada cinco años. Esto disminuye su riesgo de infecciones pulmonares.