Visión general
Los niños que practican deportes y desarrollan un dolor en el talón pueden tener una afección común conocida como enfermedad de Sever. El estrés repetitivo en la placa de crecimiento del talón puede desencadenar una inflamación dolorosa. El término clínico para la condición es la apofisitis del calcáneo. Es una inflamación de la placa de crecimiento en el talón.
La enfermedad de Sever generalmente puede tratarse sin cirugía, aunque la inflamación puede volver a ocurrir mientras un niño activo aún está creciendo.
Los síntomas
El primer síntoma que su hijo puede notar con la enfermedad de Sever es el dolor en la parte inferior o posterior de su talón. La enfermedad de Sever también puede causar enrojecimiento e hinchazón en el talón afectado. Todo el pie puede experimentar molestias y rigidez en la mañana.
La enfermedad de Sever también puede causar cojera o dificultad para correr y saltar. Su hijo puede caminar de puntillas para compensar el dolor en el talón. El dolor tiende a empeorar con la actividad y mejora con el descanso.
Los síntomas de la enfermedad de Sever se desarrollan generalmente en niñas entre las edades de 8 y 13 años, y en niños entre las edades de 10 y 15 años. Los niños tienen menos probabilidades de desarrollar la enfermedad de Sever una vez que sus pies han dejado de crecer y sus talones se han endurecido.
Causas
El pie es una de las partes del cuerpo de más rápido crecimiento. En realidad, es una de las primeras partes del cuerpo en alcanzar su tamaño adulto. Sin embargo, los ligamentos y tendones que rodean el talón y el pie no crecen tan rápido, por lo que pueden sobrecargarse y apretarse con la actividad.
Además, el talón no es muy flexible. Eso significa que es más vulnerable a las lesiones por correr y saltar sobre superficies duras. Incluso practicar deportes en césped más suave puede ser difícil en la placa de crecimiento del talón. Todo esto pone a la placa de crecimiento en riesgo de inflamación.
Factores de riesgo
Los niños que aún están creciendo y practicando deportes tienen el mayor riesgo de contraer la enfermedad de Sever. Los deportes que implican mucho correr y saltar, como el baloncesto, la gimnasia y la pista, representan los mayores riesgos.
Los factores de riesgo adicionales incluyen:
- permanecer de pie por largos períodos de tiempo, especialmente en zapatos que no proporcionan mucho relleno o soporte
- ser obeso o sobrepeso
- tener pies planos o arcos altos
- tener una pierna más corta que la otra, conocida como síndrome de la pierna corta
Como se diagnostica
Durante un examen físico, su pediatra puede apretar los costados del talón de su hijo. Si eso duele, podría significar la enfermedad de Sever. El médico también apretará otras partes del pie y el tobillo de su hijo como parte de un examen físico completo.
Es posible que se necesiten radiografías después del examen. Una radiografía puede ayudar a descartar o confirmar una fractura, pero no puede mostrar la enfermedad de Sever. Es posible que se necesiten otras imágenes para observar los ligamentos, tendones y otros tejidos.
Opciones de tratamiento
Para tratar esta condición, su hijo tendrá que tomarse un descanso de los deportes u otras actividades que puedan haber causado la condición en primer lugar. El objetivo es aliviar la tensión sobre el talón. Esto también se puede hacer con la ayuda de inserciones de zapatos ortopédicos para ayudar a sostener el talón.
El pie y el tobillo pueden necesitar inmovilizarse en un yeso durante varias semanas en algunos casos. Esto incluye si la inflamación es grave o si hay otras lesiones, como una fractura o esguince.
Para el dolor, un medicamento antiinflamatorio no esteroideo, como el ibuprofeno (Advil, Motrin), puede ser útil. También puede envolver un poco de hielo en una toalla delgada y colocarlo debajo del talón durante unos 20 minutos a la vez tres veces al día. La formación de hielo puede ayudar a reducir el dolor y la inflamación más rápidamente.
Su pediatra también puede recomendar terapia física. Un fisioterapeuta le enseñará a su hijo ejercicios de estiramiento y fortalecimiento.
Qué esperar de la recuperación
Por lo general, toma de dos a tres meses recuperarse completamente de la enfermedad de Sever. En los casos más graves, los síntomas pueden durar más tiempo o volver.
Mientras su hijo aún experimenta dolor, debe abstenerse de realizar actividades que pongan tensión en el talón. Si se necesita terapia física, asegúrese de que su hijo haga los ejercicios correctamente. También debe preguntarle al médico de su hijo sobre otras actividades que pueden hacer que no pongan mucha presión en el talón, como nadar y andar en bicicleta.
Es raro que la enfermedad de Sever cause complicaciones graves.
Perspectiva esperada
Una vez que el talón de un niño se ha endurecido y ha dejado de crecer, el riesgo de enfermedad de Sever disminuye significativamente. Hasta ese momento, es posible tener múltiples episodios de esta condición inflamatoria. Si los síntomas regresan, asegúrese de que su hijo vea a un médico. El dolor en el talón podría deberse a la enfermedad de Sever u otro problema en el pie por completo. Aprenda sobre otras causas comunes de dolor en el talón en los niños.
Para ayudar a prevenir la enfermedad de Sever, asegúrese de que su hijo use zapatos con mucho apoyo para el talón y el arco. Los zapatos deben ser apropiados para el deporte o actividad. Limitar el tiempo de su hijo en tacos también puede ayudar a preservar la salud de su talón mientras crecen.
También debe asegurarse de que las actividades de un niño sean apropiadas para su edad y capacidad. Jugar baloncesto con niños mayores y más grandes puede poner a su hijo en riesgo de sufrir una variedad de lesiones, por ejemplo.
Si ayuda a su hijo a mantener un peso saludable, también puede ayudar a reducir futuros episodios de la enfermedad de Sever.
La enfermedad de Sever puede ser dolorosa y dejar de lado a su hijo durante semanas o meses, pero con el calzado y el tratamiento adecuados, las perspectivas de una recuperación saludable son buenas.