El cáncer de pulmón es el segundo cáncer más común, según la American Cancer Society (ACS). Representa alrededor del 14 por ciento de todos los nuevos cánceres. Se estima que habrá 222,500 nuevos casos de cáncer de pulmón en los Estados Unidos en 2017.
El cáncer de pulmón se asocia con el hábito de fumar, pero también puede desarrollarse en los no fumadores. Fumar aumenta el riesgo de cáncer de pulmón. Sin embargo, aproximadamente el 20 por ciento de las personas que mueren de cáncer de pulmón en los Estados Unidos no fuman ni consumen productos de tabaco.
Protéjase de esta enfermedad mortal aprendiendo sobre las causas no fumadores del cáncer de pulmón.
Humo de segunda mano
Puede desarrollar cáncer de pulmón por exposición al humo de segunda mano. El humo del cigarrillo contiene toxinas que dañan los pulmones y causan cáncer. La inhalación de estas toxinas a través del humo de segunda mano también puede dañar los pulmones.
El humo de segunda mano puede ocurrir si usted vive con alguien que fuma o si está cerca de los fumadores. Algunos lugares públicos prohíben fumar dentro de los edificios, lo que puede ayudar a prevenir el cáncer del humo de segunda mano.
Evite las áreas con mucho humo para evitar respirar toxinas dañinas. Además, asegúrese de que otros no fumen dentro de su casa o automóvil.
Gas radón
El radón es un gas causante de cáncer que no se puede ver, oler ni saborear. Este gas se encuentra en rocas y suelo. Algunas casas y edificios están construidos sobre terrenos que contienen radón.
Vivir o trabajar en un edificio contaminado con radón no significa que desarrollará cáncer de pulmón. Pero el cáncer puede desarrollarse por la exposición prolongada a este gas. Respirar el gas daña lentamente sus pulmones, causando el crecimiento de células cancerosas. El gas radón es la segunda causa principal de cáncer de pulmón en los Estados Unidos.
Algunas personas que viven y trabajan en edificios contaminados no son conscientes del peligro. Para conocer su riesgo, debe hacer una prueba del edificio para este gas.
Si una prueba de gas radón revela un nivel superior a 4 picocurios por litro, tome medidas para solucionar el problema. Reduzca los niveles de gas radón instalando un ventilador de ventilación que extraiga el radón de su hogar u oficina. Además, selle o selle las grietas alrededor para evitar que el radón ingrese al edificio.
Exposicion ocupacional
El cáncer de pulmón también puede desarrollarse a partir de la exposición prolongada a sustancias químicas o sustancias nocivas. Estos incluyen asbestos, gases de escape diesel, arsénico, carbón y níquel. Al igual que el gas radón y el humo de segunda mano, la inhalación de estas toxinas puede dañar sus pulmones y causar cáncer.
Mantener limpio la calidad del aire en su lugar de trabajo puede prevenir el daño pulmonar y el cáncer de pulmón. Para reducir su riesgo, trabaje en áreas bien ventiladas si es posible. Use equipo para proteger sus pulmones del polvo, los gases de escape, los humos y otros contaminantes que podrían causar daños mortales.
El equipo de protección incluye una mascarilla o un respirador que se coloca sobre la nariz y la boca. Esto limpia el aire antes de que entre en su cuerpo.
Los signos de exposición tóxica en el trabajo incluyen una tos persistente, secreción nasal o garganta seca y irritada.
Contaminación del aire exterior
La contaminación del aire exterior también puede aumentar el riesgo de cáncer. La contaminación del aire exterior puede incluir metales, polvo, escape de motores, emisiones de la agricultura, transporte y emisiones industriales.
La ACS informa que el riesgo de cáncer de pulmón asociado con la contaminación exterior es bajo en los Estados Unidos, pero aún es posible. El cáncer de pulmón se forma a partir de la contaminación cuando el cuerpo no puede eliminar ciertas partículas inocuas. Las pequeñas partículas pueden quedar atrapadas en los pulmones, causando daños con el tiempo.
Evitar el cáncer de pulmón causado por la contaminación es difícil. Para protegerse, limite la actividad al aire libre con niveles altos de contaminación. Según la American Lung Association (ALA), el riesgo de cáncer de pulmón debido a la contaminación es mayor en los niños, los ancianos, los que trabajan al aire libre y las personas con enfermedad pulmonar, enfermedad cardíaca y diabetes.
Genética
La genética puede determinar cómo tus células crecen y se dividen. Algunas personas heredan mutaciones de ADN que aumentan el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer. La genética también puede dificultar que su cuerpo elimine los contaminantes que causan el cáncer de pulmón. Una fuerte historia familiar de cáncer de pulmón aumenta el riesgo de la enfermedad. Si tiene un padre, un hermano o varios familiares con cáncer de pulmón, también puede desarrollar este cáncer a pesar de no fumar nunca.
No puede controlar la genética, pero puede protegerse no fumando y evitando la contaminación nociva del aire interior y exterior, así como el humo de segunda mano.
panorama
Nunca haber fumado no significa que estés a salvo del cáncer de pulmón. Esta enfermedad puede ocurrir en no fumadores, de ahí la importancia de reconocer los síntomas de la enfermedad. Los síntomas incluyen tos persistente, tos con sangre, falta de energía y pérdida de peso inexplicable.
La tasa de supervivencia para el cáncer de pulmón depende de la etapa en que se diagnostica. El diagnóstico precoz y el tratamiento son clave para el mejor resultado posible.