Visión general
Un somatostatinoma es un tipo raro de tumor neuroendocrino que crece en el páncreas y, a veces, en el intestino delgado. Un tumor neuroendocrino está formado por células productoras de hormonas. Estas células productoras de hormonas se llaman células de los islotes.
Un somatostatinoma se desarrolla específicamente en la célula del delta delta, que es responsable de producir la hormona somatostatina. El tumor hace que estas células produzcan más de esta hormona.
Cuando su cuerpo produce hormonas de somatostatina adicionales, deja de producir otras hormonas pancreáticas. Cuando esas otras hormonas se vuelven escasas, eventualmente lleva a que aparezcan los síntomas.
Los síntomas de un somatostatinoma
Los síntomas de un somatostatinoma generalmente comienzan de manera leve y aumentan gradualmente en gravedad. Estos síntomas son similares a los causados por otras afecciones médicas. Por esta razón, es importante que haga una cita con su médico para obtener un diagnóstico correcto. Esto debería asegurar un tratamiento adecuado para cualquier condición médica subyacente a sus síntomas.
Los síntomas causados por un somatostatinoma pueden incluir los siguientes:
- Dolor en el abdomen (síntoma más común)
- diabetes
- pérdida de peso inexplicable
- cálculos biliares
- esteatorrea o heces grasas
- obstrucción intestinal
- Diarrea
- ictericia o piel amarillenta (más común cuando hay un somatostatinoma en el intestino delgado)
Las afecciones médicas que no sean un somatostatinoma pueden estar causando muchos de estos síntomas. Este es a menudo el caso, ya que los somatostatinomas son muy raros. Sin embargo, su médico es el único que puede diagnosticar la condición exacta detrás de sus síntomas específicos.
Causas y factores de riesgo de los somatostatinomas.
¿Qué causa un somatostatinoma actualmente se desconoce. Sin embargo, hay algunos factores de riesgo que pueden conducir a un somatostatinoma.
Esta afección, que puede afectar tanto a hombres como a mujeres, generalmente ocurre después de los 50 años de edad. Los siguientes son otros posibles factores de riesgo para tumores neuroendocrinos:
- Antecedentes familiares de neoplasia endocrina múltiple tipo 1 (MEN1), un tipo raro de síndrome de cáncer que es hereditario.
- neurofibromatosis
- Enfermedad de von Hippel-Lindau
- esclerosis tuberosa
¿Cómo se diagnostican estos tumores?
El diagnóstico debe ser realizado por un profesional médico. Su médico generalmente comenzará el proceso de diagnóstico con un análisis de sangre en ayunas. Esta prueba busca un nivel elevado de somatostatina. El análisis de sangre suele ir seguido de uno o más de los siguientes exámenes de diagnóstico o radiografías:
- ultrasonido endoscópico
- Tomografía computarizada
- octreoscan (que es un escaneo radioactivo)
- Exploración por resonancia magnética
Estas pruebas le permiten a su médico ver el tumor, que puede ser canceroso o no canceroso. La mayoría de los somatostatinomas son cancerosos. La única manera de determinar si su tumor es canceroso es con cirugía.
¿Cómo se tratan?
Un somatostatinoma se trata con más frecuencia mediante la extirpación del tumor mediante cirugía. Si el tumor es canceroso y el cáncer se diseminó (una afección denominada metástasis), la cirugía puede no ser una opción. En el caso de metástasis, su médico tratará y controlará los síntomas que pueda estar causando el somatostatinoma.
Afecciones asociadas y complicaciones | Complicaciones
Algunas de las afecciones asociadas con los somatostatinomas pueden incluir las siguientes:
- síndrome de von Hippel-Lindau
- MEN1
- neurofibromatosis tipo 1
- diabetes mellitus
Los somatostatinomas generalmente se encuentran en una etapa posterior, lo que puede complicar las opciones de tratamiento. En una etapa tardía, es más probable que los tumores cancerosos ya hayan hecho metástasis. Después de la metástasis, el tratamiento es limitado, porque la cirugía generalmente no es una opción.
Tasa de supervivencia para los somatostatinomas.
A pesar de la naturaleza rara de los somatostatinomas, el pronóstico es bueno para la tasa de supervivencia a 5 años. Cuando un somatostatinoma se puede extirpar quirúrgicamente, hay una tasa de supervivencia de casi el 100 por ciento cinco años después de la extirpación. La tasa de supervivencia a cinco años para los pacientes tratados después de que un somatostatinoma ha hecho metástasis es del 60 por ciento.
La clave es obtener un diagnóstico lo antes posible. Si tiene algunos de los síntomas de un somatostatinoma, debe hacer una cita con su médico lo antes posible. Las pruebas de diagnóstico podrán determinar la causa específica de sus síntomas.
Si su médico determina que usted tiene un somatostatinoma, entonces, cuanto antes comience el tratamiento, mejor será su pronóstico.