¿Los antibióticos naturales realmente funcionan?
Los antibióticos se usan para matar o inhibir el crecimiento de bacterias. Aunque podría pensar en los antibióticos como medicina moderna, en realidad han existido durante siglos. Los antibióticos originales, como muchos de los antibióticos actuales, se derivan de fuentes naturales.
Ciertos extractos de plantas, aceites esenciales e incluso alimentos tienen propiedades antibióticas. Por ejemplo, algunos extractos de alimentos y vegetales pueden prevenir el crecimiento de bacterias en los alimentos.
A veces, estas propiedades se extienden más allá de los alimentos y pueden ayudar en su higiene personal. El extracto de arándano contiene compuestos antibacterianos y antioxidantes, lo que lo convierte en un remedio casero para las infecciones del tracto urinario (ITU).
Las hierbas también pueden ser antibióticos. Una pequeña muestra de 58 plantas chinas encontró que 23 tenían propiedades antibacterianas y 15 tenían propiedades antifúngicas. Un estudio de 2014 descubrió que una terapia a base de hierbas era tan efectiva como un antibiótico químico para tratar un trastorno de crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado.
Sigue leyendo para conocer los cinco antibióticos populares que puedes probar en casa.
Opción # 1: Miel
La miel es uno de los antibióticos más antiguos conocidos, que se remonta a los tiempos antiguos. Los egipcios usaban frecuentemente la miel como antibiótico natural y protector de la piel.
La miel contiene peróxido de hidrógeno, lo que puede explicar algunas de sus propiedades antibacterianas. También tiene un alto contenido de azúcar, que puede ayudar a detener el crecimiento de ciertas bacterias.
Además, la miel tiene un bajo nivel de pH. Esto funciona para alejar la humedad de las bacterias, causando que las bacterias se deshidraten y mueran.
Para usar la miel como antibiótico, aplíquelo directamente sobre la herida o el área infectada. La miel puede ayudar a matar las bacterias y ayudar en el proceso de curación. Si es posible, opta por la miel cruda de Manuka. Esta forma de miel ofrece los mayores beneficios para la salud.
También puede ingerir miel para ayudar en el tratamiento de infecciones internas. Simplemente trague una cucharada entera o revuélvala en una taza caliente de té de hierbas para un tratamiento relajante.
La miel es generalmente segura para usar en la piel o en el cuerpo, aunque nunca debe darle miel a un bebé menor de 1 año. En su lugar, consulte a su médico para una alternativa adecuada.
Opción # 2: Extracto de ajo
Durante mucho tiempo se ha pensado que el ajo tiene propiedades antimicrobianas. Un estudio de 2011 encontró que el concentrado de ajo es eficaz contra las bacterias. Puede comprar concentrado o extracto de ajo en su tienda local de alimentos saludables. También puede hacer los suyos remojando unos pocos dientes de ajo en aceite de oliva.
El ajo es generalmente seguro de ingerir, pero grandes dosis pueden causar sangrado interno. Hasta dos dientes por día se considera una dosis aceptable. Si está tomando un suplemento de ajo, asegúrese de seguir las instrucciones de dosificación según lo indicado.
Si está tomando medicamentos para adelgazar la sangre, consulte a su médico antes de usar el ajo como antibiótico. Grandes dosis de ajo pueden amplificar los efectos de este medicamento.
También puede aplicar el concentrado de ajo directamente a una herida o mancha.
Opción # 3: extracto de mirra
Muchas personas están familiarizadas con la mirra, pero su capacidad para protegerse de los gérmenes dañinos no es tan conocida.
Los investigadores en un estudio de 2000 concluyeron que un extracto de mirra podría matar varios patógenos cotidianos. Esto incluye:
- E. coli
- Staphylococcus aureus
- Pseudomonas aeruginosa
- Candida albicans
La mirra es generalmente bien tolerada, pero ingerirla puede causar diarrea. Si aplica mirra a la piel, es posible que experimente una pequeña erupción cutánea. Si se consume en grandes dosis, la mirra puede causar problemas cardíacos. La mirra suele estar preempaquetada, así que asegúrese de seguir las instrucciones de dosificación en la etiqueta.
Opción # 4: aceite esencial de tomillo
Muchos limpiadores domésticos naturales utilizan aceite esencial de tomillo. Se ha demostrado que este aceite es especialmente útil contra las bacterias resistentes a los antibióticos.
En un estudio de 2011, los investigadores probaron la efectividad del aceite esencial de lavanda y tomillo. Ambos aceites fueron probados en un grupo de más de 120 cepas de bacterias. Los investigadores descubrieron que el aceite esencial de tomillo es más eficaz para matar bacterias que el aceite esencial de lavanda.
El aceite esencial de tomillo es sólo para uso externo. No debes tomar el aceite de tomillo por vía oral. Antes de aplicar al área afectada, asegúrese de diluir el aceite esencial con partes iguales de aceite portador. Los aceites portadores comunes incluyen aceites de coco y de oliva.
La aplicación de aceite esencial no diluido en la piel puede causar inflamación e irritación.
Las personas con presión arterial alta o problemas de hipertiroidismo no deben usar el aceite esencial de tomillo.
Opción # 5: Aceite esencial de orégano
El carvacrol es un ingrediente que se encuentra en el aceite esencial de orégano. Tiene importantes propiedades terapéuticas que activan aún más la curación en el cuerpo cuando se inhala. El aceite de orégano se ha encontrado para ayudar a curar las úlceras gástricas y reducir la inflamación.
Para tratar las infecciones por hongos en la piel, agregue unas gotas de aceite esencial de orégano al agua. Aplicar la mezcla sobre la zona afectada. También puede difundir aceite de orégano en el aire para ayudar a eliminar las infecciones sinusales. No debe ingerir aceite esencial de orégano o usar aceite esencial no diluido en la piel.
También puede erradicar las bacterias en el hogar con un agente de limpieza casero hecho de aceite esencial de orégano, vinagre, agua y limón.
La línea de fondo
Asegúrese de hablar sobre su interés en los antibióticos naturales con su médico. Pueden ayudarlo a explorar sus opciones y ayudarlo a sopesar los beneficios y riesgos potenciales de cada régimen.
No debes tomar antibióticos a menos que sea absolutamente necesario. Tomar antibióticos por tomar antibióticos puede llevar a su cuerpo a desarrollar una resistencia a la medicación. Puede aprender formas para ayudar a prevenir la resistencia a los antibióticos aquí.Si su médico le prescribe antibióticos, asegúrese de terminar todo el régimen de tratamiento.