Visión general
La falta de aliento puede ser un signo temprano de fibrosis pulmonar idiopática (FPI), una enfermedad pulmonar rara y grave que generalmente afecta a personas de mediana edad o adultos mayores entre 50 y 70 años. Desafortunadamente, la dificultad para respirar también puede ser un síntoma de Otras afecciones crónicas como enfermedades del corazón, asma y EPOC.
Con la FPI, los pequeños sacos de aire en sus pulmones llamados alvéolos se vuelven gruesos y rígidos o cicatrizados. Esto también significa que sus pulmones tienen dificultad para transportar oxígeno al torrente sanguíneo y a sus órganos. Las cicatrices en los pulmones a menudo empeoran a medida que pasa el tiempo. La respiración y el suministro de oxígeno, como resultado, se deterioran cada vez más.
No hay cura para la FPI. El curso de la enfermedad varía mucho entre los individuos. Algunas personas tienen un empeoramiento rápido, otras tienen episodios de empeoramiento, otras tienen una progresión lenta y otras permanecen estables durante años. Si bien los expertos coinciden en que la duración media de la supervivencia en individuos con FPI suele ser de tres a cinco años a partir del diagnóstico, las personas con enfermedad estable pueden vivir mucho más tiempo. La insuficiencia respiratoria es la causa más común de muerte en la FPI, pero otras causas pueden incluir:
- hipertensión pulmonar
- insuficiencia cardiaca
- embolia pulmonar
- neumonía
- cáncer de pulmón
Falta de aliento
Uno de los primeros signos de la FPI es la falta de aliento. Puede notar que está sin aliento mientras camina por la calle o sube las escaleras. Es posible que tenga dificultad para respirar mientras realiza otras tareas físicas y necesita tomar descansos para completarlas. Esto sucede porque la FPI causa rigidez o engrosamiento y cicatrización en los pulmones. A medida que sus pulmones se vuelven más rígidos, es más difícil que se inflen y no puedan contener tanto aire.
La dificultad respiratoria también se conoce como disnea. En las últimas etapas de la enfermedad, la dificultad para respirar puede dificultar hablar por teléfono, comer o incluso respirar por completo mientras descansa.
Otros sintomas
La tos es otro síntoma temprano de la FPI. Esta tos suele ser seca y no produce flema ni moco.
Otros síntomas de la enfermedad, pueden incluir:
- sonidos anormales de respiración (crepitantes)
- paliza de dedos o dedos de los pies
- fatiga
- dolores musculares y articulares
- pérdida de peso inexplicable
Los expertos coinciden en que el curso de la FPI puede ser impredecible.
Cuando ver a tu doctor
Si tiene dificultad para respirar o tiene alguno de los otros signos de FPI, haga una cita con su médico para un examen físico. Pueden derivarlo a un neumólogo: un especialista en pulmones que puede evaluar radiografías, pruebas de respiración, pruebas de corazón, biopsias y pruebas de nivel de oxígeno en la sangre.
Es posible que desee responder las siguientes preguntas antes de su cita para poder darle a su médico una mejor idea de su historial médico:
- ¿Cuáles son tus síntomas? ¿Cuándo empezaron?
- ¿Cuál es su ocupación actual o anterior?
- ¿Tienes otras condiciones médicas?
- ¿Qué medicamentos y / o suplementos está tomando actualmente?
- ¿Fumas? Si es así, ¿con qué frecuencia y por cuántos años?
- ¿Conoces a miembros de tu familia que hayan tenido enfermedad pulmonar crónica o FPI específicamente?
- ¿Hay algo más que crea que su médico debería saber sobre su salud?
Perspectiva y autogestión.
La falta de aliento puede ser una señal temprana de que tiene IPF. Si experimenta este síntoma, diríjase a su médico para un examen físico y una evaluación. Obtener un diagnóstico preciso lo antes posible puede ayudarlo a obtener tratamientos que puedan retardar el progreso de la enfermedad y mejorar su calidad de vida.
Si se le diagnostica, hay algunas cosas que puede hacer para sentirse mejor:
- Si fumas, deja de hacerlo. Fumar es perjudicial para los pulmones. Su médico puede brindarle apoyo para ayudarlo a dejar de fumar o puede comenzar su plan para dejar de fumar hoy mismo en CDC.gov.
- Coma una dieta saludable. Cuando respirar es difícil, es posible que no tenga ganas de comer, lo que puede hacer que pierda peso. Agregue frutas, verduras, granos enteros, productos lácteos bajos en grasa o sin grasa y carnes magras a su rutina diaria. Coma comidas más pequeñas y frecuentes.
- Ejercicio. Aunque puede preocuparse por tener dificultad para respirar, mover su cuerpo realmente puede ayudar a mantener la función pulmonar y disminuir los niveles de estrés.
- Descansa bien Dormir y tomarse un tiempo para descansar es tan importante como hacer ejercicio. Puede ayudar con sus niveles de energía y con el manejo del estrés.
- Considere las vacunas. La vacuna contra la neumonía, la vacuna contra la tos ferina y las vacunas contra la gripe pueden protegerlo contra infecciones respiratorias que podrían empeorar su FPI.
- Tome los medicamentos como lo indique su médico. Mientras lo hace, asegúrese de estar al día con sus citas, informar cualquier síntoma nuevo o inusual y seguir las instrucciones que le haya dado su médico.
En el pasado, los medicamentos se centraban en el tratamiento de la inflamación. Los medicamentos más recientes se centran en el tratamiento de cicatrices. La pirfenidona y el nintedanib, dos medicamentos aprobados en 2014 para el tratamiento de la fibrosis pulmonar, a menudo ahora se consideran el tratamiento estándar. Se ha demostrado que estos medicamentos disminuyen la progresión de la enfermedad y disminuyen el empeoramiento de la función pulmonar.