Bajo demanda frente a profilaxis. Comprensión de la hemofilia A Tratamiento con medicamentos

Artículos solo con fines educativos. No automedicarse. Para todas las preguntas relacionadas con la definición de la enfermedad y los métodos de tratamiento, comuníquese con su médico. Nuestro sitio no es responsable de las consecuencias causadas por el uso de la información publicada en el portal.

Si tiene hemofilia A, se necesita un monitoreo y tratamiento continuos para prevenir el sangrado excesivo y las complicaciones. No existe cura para esta afección, pero con el cuidado y la administración adecuados puede disfrutar de una buena calidad de vida. El tratamiento puede incluir una combinación de medicamentos a pedido y preventivos para detener el sangrado y reducir su aparición.

Hable con su médico acerca de los siguientes planes de profilaxis y medicamentos de acción rápida para la hemofilia A. Lo que mejor funcionará para usted depende de la gravedad de su afección, su estado de salud general y otros factores.

Tratamientos a demanda

Las formas leves de hemofilia A pueden responder positivamente a los tratamientos periódicos a pedido. Si tiene un tipo leve de hemofilia A, significa que no sangra espontáneamente y solo tiende a sangrar después de una lesión. Su médico puede ayudarlo a tomar esta determinación.

Los tratamientos a pedido o de rescate para la hemofilia A leve incluyen principalmente inyecciones de desmopresina (DDAVP). DDAVP es una inyección hormonal que induce la liberación de factor VIII en su sangre. Cuando se toma al primer signo de lesión, esto puede ayudar a que la sangre se coagule como debería. De esta manera, no sangras excesivamente. Estas inyecciones son recetadas y administradas por su médico. DDAVP también está disponible como un aerosol nasal que puede usar en casa o mientras viaja.

Si bien la DDAVP puede ayudar a detener el sangrado excesivo, no debe usarse de manera regular porque podría reducir su eficacia. Si descubre que está usando DDAVP más de unas pocas veces al mes, es posible que deba hablar con su médico acerca de su plan de tratamiento y considerar otras terapias.

La hemofilia A grave también se puede tratar con infusiones de factor VIII de coagulación. Cuando se usan como un tratamiento a pedido, estas infusiones proporcionan agentes de coagulación de emergencia si experimenta sangrado. Las infusiones del factor de coagulación se realizan a partir de plasma o componentes diseñados en el laboratorio para estimular la coagulación de la sangre. La desventaja de las infusiones a pedido para la hemofilia A grave es que los factores de coagulación pueden no ser administrados de manera oportuna para detener el sangrado cuando ocurre.

Tratamientos profilácticos.

La terapia de infusión también se usa en el tratamiento profiláctico para la hemofilia A. Las infusiones preventivas de sangre ayudan a aumentar la cantidad de factor VIII de coagulación en el cuerpo para que no tenga sangrados frecuentes o de larga duración. La cantidad de infusiones que recibe depende de la gravedad de su afección. Es posible que pueda hacer estas infusiones en casa.

La profilaxis con infusiones también puede ayudar a prevenir el sangrado interno causado por la hemofilia A. Mientras que algunos casos de sangrado interno son evidentes con moretones, otros no. Sin tratamiento, la hemorragia interna puede ser especialmente peligrosa y causar daño a los nervios y tejidos.

Los posibles efectos secundarios de la terapia de infusión incluyen infecciones virales y el desarrollo de anticuerpos que destruyen el factor VIII. Su médico puede prescribir medicamentos antifibrinolíticos junto con infusiones. Estos medicamentos orales ayudan a prevenir la descomposición de los coágulos.

La profilaxis para la hemofilia A también significa tomar medidas adicionales para reducir el riesgo de lesiones. Por ejemplo:

  • usar equipo de protección al practicar deportes de mayor riesgo o realizar otras actividades
  • ir a terapia física para ayudar a reducir el impacto del sangrado en las articulaciones
  • Proteger los extremos de los muebles y otras áreas en las que eres propenso a chocar.

Aún así, incluso con hemofilia A de leve a moderada, las precauciones anteriores no necesariamente significan que no necesita medicamentos. De hecho, algunos medicamentos para la hemofilia A pueden ayudar a prevenir el inicio del sangrado en ciertas situaciones. Por ejemplo, si va a practicar un deporte de mayor riesgo o se someterá a un trabajo dental, es posible que deba tomar DDAVP como precaución.

¿Qué opción elegir?

Los tratamientos que tomará para la hemofilia A en última instancia dependen de la gravedad de su afección. Si bien los medicamentos para el factor VIII pueden ayudar con la coagulación, las medidas preventivas pueden ser igualmente importantes.

La edad es otra consideración importante. Dado que la hemofilia A está presente desde el nacimiento, muchas personas son diagnosticadas durante la infancia. Casos más graves son evidentes durante la infancia. Es posible vivir una larga vida con esta afección, pero los adultos mayores pueden ser más vulnerables al sangrado excesivo y las complicaciones. A medida que envejece, su médico puede recomendar que se le apliquen inyecciones de emergencia como medida de precaución. Por otro lado, el tratamiento para niños se enfoca en prevenir lesiones innecesarias y el uso de profilaxis de infusión para niños con hemofilia A severa.

Línea de fondo

Los tratamientos farmacológicos para la hemofilia A han evolucionado y han permitido a las personas con esta afección vivir más tiempo y disfrutar de una mejor calidad de vida. Tanto los tratamientos farmacológicos preventivos como los solicitados pueden ayudar a su condición al detener el sangrado, al tiempo que disminuyen la aparición de sangrado. Hable con su médico para conocer sus opciones y qué funcionará mejor para usted.

Los investigadores también están trabajando en terapias genéticas para la hemofilia A. Esto implicaría el reemplazo de genes faltantes o dañados que podrían estar contribuyendo a la enfermedad. Según el Instituto Nacional de Investigación del Genoma Humano, esto podría allanar el camino hacia una posible cura. Es posible que desee considerar hablar con su médico acerca de participar en ensayos clínicos.